Ya estamos de vuelta y no queríamos volver... hemos estado tan a gusto! Unos cuantos días (varias semanas mejor dicho) de vacaciones a orillas del Mediterráneo son suficientes para que su luz, su clima y su aroma nos atrape amablemente.
Hace diez años que no veraneábamos en Salou. Allí las cosas han cambiado bastante desde entonces pero todavía podemos reconocer lo mejor de lo que dejamos en su momento. Las playas, el Paseo, las calas, los helados de la Ibense, PortAventura, el trenet y los amigos, que siempre están. Hemos encontrado un Salou de playas limpias, un paseo estupendo con diferentes niveles y ampliado hacia el mar, fuentes preciosas y chiringuitos muy chulos. Un lugar ideal para viajar en familia.
Se puede decir que no hemos salido del agua. Por la mañana, por la tarde y por la noche en el agua. En la piscina, en el mar, en las fuentes del Paseo (muy recomendable la Fuente del Laberinto), en las duchas... Agua y calor a todas horas y por todos lados. Nosotros hemos estado muchos días en la Playa de Levante (donde hay menos gente cuanto más cerca de la Calle Barcelona) y en la de Poniente (en la que hay que alejarse un poco de la entrada al Puerto Deportivo para disfrutar de un agua más limpia). Estas dos zonas son más tranquilas, se nota que hay menos hoteles, la altura de los edificios de primera linea es más baja y todo ello colabora a que todo sea más agradable (tal vez haya influido también que los días han sido de julio y no de agosto, cuando hay más gente en Salou).
Y como siempre, hemos tratado de buscar tesoros. Hemos cogido muchas conchas y hasta un erizo (que pos supuesto devolvimos a su sitio), con el que han alucinado los peques... y ya ni te cuento con un esqueleto también de erizo que encontramos al día siguiente, una verdadera maravilla de la naturaleza que os dejamos aquí... En fin, que estos días han sido tranquilos, divertidos y sanos. Y como no podía ser de otra manera, hemos aprovechado para comer cosas típicas de por aquí: así que uno de los productos que primero hemos probado ha sido la butifarra, preparada en fideuá.
Después de la comida baño en la piscina vespertino y paseo nocturno por el Salou de las luces. Que en seguida os pasamos a contar en la siguiente entrada...
No hay comentarios:
Publicar un comentario