Esta noche hemos cenado canelones de espinacas, bacon y ciruelas. Nos han regalado unos cuantos frutos secos y vamos a usarlos estos días. Orejones de albaricoque, higos desecados, dátiles y ciruelas. La verdad es que con las ciruelas recordamos el pollo en pepitoria que solemos comer por Navidad, y esta vez nos hemos animado a mezclarlas con unas espinacas que teníamos en el congelador para preparar el relleno de unos canelones. Hemos preparado unas tiras de bacon y cebolla picada en la sartén, y una vez doradas hemos añadido las ciruelas en pequeños trocitos y las espinacas frescas cocidas. El resto es preparar la pasta de los canelones, rellenarlos con las espinacas y cubrirlos en una bandeja con bechamel. Veinte minutos en el horno y otros cinco gratinando. Que aproveche.
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